Buceo nocturno

Todos nuestros cursos de especialidad incluyen: material necesario para la teoría, equipo completo para todas las inmersiones y tasas de registro PADI. Sólo necesitarás toalla y bañador.

Los cursos de especialidad son una titulación completa sobre una temática específica. Suelen constar de varias secciones de teoría, además de una serie de inmersiones con ejercicios asociados a la temática del curso. Al finalizar, se obtiene una certificación de la especialidad.
Por otro lado, las inmersiones de aventura son experiencias temáticas para buceadores certificados. Constan de una introducción a la teoría de la especialidad, sin profundizar en el temario completo, más una única inmersión con algunos de los ejercicios que se practican en el curso. Al finalizar la inmersión de aventura no se obtiene un carné de certificación sino un registro de entrenamiento de la aventura. Este registro te sirve para terminar el curso de la especialidad concreta más adelante o como aventura del programa Advanced Open Water Diver.

El objetivo principal de un curso de especialidad es que practiques y aprendas, en un entorno controlado, una nueva técnica, el uso de equipo específico o a bucear en condiciones diferentes a las de tu entrenamiento previo. Proporcionándote, así, las herramientas necesarias para afrontar situaciones reales de buceo con seguridad y confianza en ti mismo y en los protocolos que sigues. Además, en la mayoría de centros de buceo querrán asegurarse de que tengas la titulación específica si solicitas determinados servicios. Por ejemplo, bucear con aire enriquecido Nitrox.
Por último, la certificación de un curso de especialidad representa un estándar de formación en una temática específica, lo que supone una cobertura extra al justificar que buceas dentro los límites de tu entrenamiento, de cara a tu empresa aseguradora, en caso de que sufras alguna contingencia.
En resumen, es importante que realices entrenamiento específico siempre que vayas a afrontar situaciones de buceo desconocidas para ti, por tu seguridad, por tu disfrute y por la cobertura legal que ese entrenamiento te proporciona.

En la escuela Delta desaconsejamos categóricamente exponerse a situaciones de buceo para las que no se tiene entrenamiento. Bucear de noche supone el uso de equipamiento y una preparación previa diferentes a los de las inmersiones con luz natural. Las inmersiones nocturnas nos transportan a “un mundo encantado”, con especies a cuyos comportamientos no estamos acostumbrados. Si no tenemos el entrenamiento necesario, puede ser muy fácil desorientarnos, aun en puntos de inmersión conocidos, y que la experiencia resulte angustiosa. Sin embargo, bajo tu responsabilidad, puedes hacerlo.